Otra buena manera de empezar la semana es tranquilos. En vez de hacerlo con fuerza y enegía como otras veces (que también), esta vez vamos a hacerlo tranquilitos. Muchos sabemos que es fácil la teoría para controlar el estrés, pero no tanto la práctica. A continuación os dejo unas pequeñas pero poderosas guías que marcarán la diferencia. Sólo hay que ir una por una y cumplirla, no vale con intentarlo, hay que hacerlo:
- Sé positivo, la balanza se inclinará a tu favor.
- No te sobrecargues con actividades. Organiza tu agenda.
- Sé realista. No trates de ser perfecto, nadie lo es
- Duerme bien
- Aprende a relajarte
- Cuida tu cuerpo. Lleva una dieta equilibrada y realiza ejercicio físico con regularidad
- Tus perspectivas, actitud y pensamientos influyen mucho en la manera en que percibes las situaciones
- Cuida a los tuyos. Comparte tu tiempo con tu familia, amigos, compañeros…
Ahora a trabajar en estos puntos y a disfrutar de una buena semana!