Qué gran filosofía de vida se esconde bajo esta frase: «Sonríe que la vida vuela«. Déjate de vanalidades y preocupaciones superficiales (es decir, las que ocupan el 90% de nuestra cabeza) y librémonos de ellas con una simple sonrisa, una para nosotros que nos la merecemos, y otra para los demás, que se la merecen igual.
Ale, a por el Lunes con una misión en la cabeza: Sonreir.